Por un lado, tenemos el naciente conflicto entre Israel e Irán por las ambiciones nucleares, y por el otro, una guerra civil que se ha enconado desde hace mucho tiempo en Estados Unidos.
Israel lanzó ataques feroces contra el corazón de la estructura nuclear y militar de Irán el viernes, desplegando aviones de combate y aviones no tripulados previamente introducidos de contrabando en el país para atacar instalaciones clave y matar a altos generales y científicos, un bombardeo que dijo que era necesario antes de que su adversario se acercara más a la construcción de un arma atómica.
Irán contraatacó el viernes por la noche lanzando decenas de misiles balísticos contra Israel, donde estallaron explosiones en los cielos de Jerusalén y Tel Aviv y sacudieron los edificios de abajo. El juego está en marcha, así que será mejor que cuides tus pasos.
"Porque se levantará nación contra nación, y reino contra reino, y habrá hambres, y pestes, y terremotos, en diversos lugares. Todo esto es el principio de los dolores". Mateo 24:7,8 (RV)
El conflicto militar entre Israel e Irán comenzó en serio el viernes y se intensifica cada hora. Israel planeó este ataque durante los últimos 25 años, y ahora ha comenzado.
En Estados Unidos, las tensiones civiles que se han estado cocinando a fuego lento desde hace mucho tiempo y que están siendo avivadas por ambos bandos amenazan con llegar a un punto de ebullición el sábado 14 de junio, en algo llamado el "Día Nacional de Desobediencia Civil Sin Reyes", financiado por supuesto por George y Alex Soros.
Donald Trump, por su parte, está más que dispuesto a utilizar el poder del ejército estadounidense para hacer retroceder la marea de la anarquía, pero ¿es eso una extralimitación asombrosa o la reacción correcta? Y solo por diversión, el Grupo Bilderberg está celebrando su reunión anual para planear el destino del mundo.
Si estás esperando a que comience el fin de los tiempos, ya llegas tarde.
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